Después del periodo vacacional navideño , que para nosotros ha sido muy cortito porque en los hoteles han sido días de trabajo, toca retomar otros temas pendientes que para mí tienen una importancia especial. Aunque ya os he hablado en este blog de mi pasión por la semana Santa de Málaga y mi vinculación desde niño a la Cofradía del Rocío, hay un tema del que aún no había hablado en este espacio personal, mi candidatura a Hermano Mayor de la Cofradía en las últimas elecciones celebradas en la Hermandad.
No es ningún secreto mi desacuerdo con las últimas decisiones tomadas por el obispado, a mi juicio contrarias a la tradición de la Semana Santa de Málaga, así como mis demandas de que se cumplan los fines de obra social y apoyo a los desfavorecidos, que deben ocupar un lugar destacado en la labor de la Cofradía. Esta situación me ha llevado a coger el toro por los cuernos y a presentarme como candidato, buscando un proyecto común capaz de devolver la ilusión a los hermanos.
Muchos leeríais en la prensa sobre unas elecciones que he considerado necesario impugnar, y cuyas irregularidades han motivado que el obispado intervenga la Cofradía y ordene repetir los comicios, declarando nulos todos los actos jurídicos que se han producido a partir de las mismas. A pesar lo publicado en los medios, el obispado de momento no me ha comunicado nada, aunque parece ser que ha emitido un comunicado que se ha reproducido en la la prensa local.
Tengo que decir aquí que yo presenté tres impugnaciones concretas al obispado sobre las que a fecha del día en que salieron en prensa no recibí contestación alguna. Dos de estas tres impugnaciones solicitaba que se anulara la convocatoria de las elecciones para nuevo hermano mayor, algo que solicité antes de las elecciones y sobre lo que nunca recibí contestación. Para mí hay un claro fraude de ley, porque el actual Hermano Mayor José Lupiáñez no puede dimitir para volver a presentarse. Sin embargo, las elecciones se celebran sin que me hayan comunicado nada de las dos impugnaciones, por lo que presento una tercera, comunicando el silencio administrativo al obispado notarialmente, de la tampoco he recibí contestación alguna.
El diario Sur publica en su artículo que yo había sido consultado y que estaba de acuerdo con la decisión del obispado, pero no es cierto porque nadie me ha preguntado sobre este tema. El único que sí se ha puesto en contacto conmigo ha sido el periódico la Opinión de Málaga, al que manifesté la verdad, que no me habían comunicado nada.
De todas maneras, tengo que decir que este aplazamiento de las elecciones, que deberán realizarse antes de la Cuaresma, me sigue pareciendo una ilegalidad, porque si he presentado alegaciones ha sido por las muchas irregularidades del proceso y si el obispado ordena repetir las elecciones está reconociendo que las había. Considero que lo correcto es anular este proceso de elecciones y admitir la impugnación que presenté en un primer momento.
Todo esto es un tema bastante delicado y hay que opinar con bastante cuidado.
Coincido contigo Cristóbal, un Hermano Mayor no puede dimitir para volver a presentarse.Aunque el dice que lo hizo para que los nuevos hermanos no pudieran votar.
En la Cofradia hace falta alguien con un criterio tan malagueño como usted, que todo sea dicho de paso, ahora esta sin rumbo.O mejor dicho tirando para tierras sevillanas con los «botecitos», etc.
Aparte de una falta de ideas y soluciones para el patrimonio de la Cofradia, como viene siendo el Trono de Nuestra Novia de Málaga, que pide a gritos un Trono como la Señora se merece.
Y que hablar de los continuos comentarios despectivos hacía su persona con el ánimo de sólo salir beneficiados ellos mismos.
Cristóbal, según dicen el sábado día 18 de febrero podría ser la fecha de las elecciones.¿Podrán votar los nuevos hermanos?¿Sigues con el mismo programa de candidatura?.
Por cierto doy por echo que si usted sale elegido Hermano Mayor podremos tener de capataz
en la cola al gran Juanma ¿no?.
Te deseo suerte y que los hermanos esta vez sepan valorar sus ideas y salgas elegido como Hermano Mayor.Y podamos ver algún día ese magnifico Trono que tienes entre manos para la Reina de la Victoria.
Un abrazo.
querido amigo jose los botecitos sevillanos que os quede claro se infundaron por la cabezoneria del señor peñarroya de seguir con los tronos mesiendolos,que al llegar ese año veniamos reventando las patas del cajillo de arrastrar,y el se puso a tocar la campana.
Estimado Juan.
Lo que dice usted de dar los botecitos con el trono, no es cierto, nunca lo he permitido. Otra cosa es mecer a la Virgen, dar un paso corto, que es distinto a dar botes.
Un saludo.